Un día en la playa

La Técnica del Grabado, especialmente el "hueco-grabado", por su complejidad, me conduce siempre a una "figuración" más rigurosa que cuando trabajo con otras técnicas más gestuales o más plásticas. Este hecho es crucial en el contenido de una parte de mi obra, la propiamente figurativa, con la que no había encontrado una manera fluida de relacionarme antes de dedicar una sustancial parte de mi tiempo al grabado.

El tema general de la muestra, el Mar y los bañistas, es un clásico de la pintura, y, volviendo la vista atrás, es un tema que llevo abordando desde que empecé a pintar. Las escenas de agua ofrecen infinitas posibilidades plásticas. Y por supuesto me interesa la carga de contenido que produce la presencia humana, ya sean adultos o niños, realizando una actividad natural y espontánea, con la que todos nos sentimos identificados y que nos retrotrae al gozo y a la infancia. El asunto de los bañistas me permite también modestamente acercarme a una de las cualidades que más me interesa de la Pintura, y que, dicho sea de paso, no goza de muy buena reputación en los últimos tiempos: la Belleza.